Nicolás Santo fue el primer uruguayo que trabajó como funcionario público en el Estado chino. Lo hizo para el gobierno de la ciudad de Foshan en el sureste del país, la región más pujante en términos de desarrollo. En base a esa experiencia escribió su libro “Un tango con el dragón”.
Además es el creador de la nwesletter China notes que aborda las noticias en las relaciones entre China y América Latina.
No toquen nada lo consultó a partir del anuncio del gobierno uruguayo del inicio del estudio de prefactibilidad para firmar un Tratado de Libre Comercio con el gigante asiático.
En la entrevista, Santo habló de sociedades secretas, “que no son nada secretas”, y sirven como redes para facilitar inversiones en distintos países.
“Hoy las sociedades secretas, que no son nada secretas, son las redes de exalumnos de la universidades de elite. Hoy lo bacalaos se cortan entre los exalumnos de Harvard, los exalumnos de Yale, de Columbia y demás, que acceden a puestos estratégicos en distintas empresas a nivel global, que se conocen entre todos por obvias razones y las recomendaciones que se hacen en materia de inversión van generando acuerdos y negocios reales que se traducen en puestos de trabajo y riqueza genuina para muchos países”, explicó.
En ese sentido, dijo que Uruguay debería aprovechar el interés que existe en China respecto a América Latina. “Hay mucho talento chino al que le atraería posicionarse como número uno en ese país en materia de nuestra región”, dijo.
Entonces propuso generar convenios con las mejores escuelas de negocios de China.
“Les diría que a sus mejores estudiantes que tengan interés en desarrollar una carrera vinculada a América Latina, los traigan a Uruguay, nosotros los tendríamos aquí por tres meses trabajando en empresas uruguayas, apoyándolas en el desarrollo de una estrategia para China”, afirmó.
Esos estudiantes luego volverían a su país para desarrollar sus carreras. “El día de mañana cuando estén en puestos de decisión y tengan que ver dónde establecer su próxima fábrica, ver desde qué país comprar su nuevo producto, tendrán a Uruguay en mente. Es la mejor forma de generar embajadores de negocios de largo plazo y es una fórmula efectiva en materia de costo”, señaló.