“Todos nos dimos cuenta este año: lo esencial de la presencialidad como ese espacio que no solo permite aprender con los pares y mano a mano con el docente sino que es esencial para la socialización”, explicó Furman.
Mientras en Uruguay se debate cómo recuperar la presencialidad plena en los centros educativos públicos y muchos grupos de padres y madres han presentado propuestas en ese sentido, Furman habló en No toquen nada de “esa dimensión tan enorme de la escuela que es aprender a vivir con otros”.
“Vivir la infancia y la adolescencia en compañía de los pares es algo irremplazable a distancia. Por más que nos conectemos por zoom o por cualquier plataforma hay algo de estar cara a cara, con el cuerpo, de vivir, de jugar y trabajar en grupo. Si bien hay mucho que se puede tratar de hacer desde lo virtual para generar instancias colaborativas nunca es lo mismo”, afirmó.