Además, en el primer trimestre de año se registró una caída de 1,4% en términos interanuales del Producto Interno Bruto según el informe de Cuentas Nacionales publicado este miércooles por el Banco Central del Uruguay.
El único sector de la economía que no registró una caída de su actividad en enero, febrero y marzo en relación a igual período del año pasado fue Transporte, almacenamiento y comunicaciones que aumentó en un 4,4% y aportó casi un punto de efecto positivo al PIB.
El resto de las actividades cayeron, las que lo hicieron con más contundencia fueron Actividades primarias (menor producción de soja y en faena de vacunos), y Construcción (donde la caída de la obra pública no fue compensada por las obras del Ferrocarril Central y la planta de UPM II).
También se registra un efecto negativo de Suministro de electricidad, gas y agua por el efecto de la sequía y la menor exportación de electricidad.
Desde el punto de vista del gasto tanto el consumo como la inversión crecieron en el período, pero el efecto de esos aumentos no pudo compensar el efecto negativo de la caída de las exportaciones y el aumento de las importaciones que genera un impacto negativo en las cuentas nacionales.
Este dato de caída de la actividad económica contempla menos de tres semanas de la emergencia sanitaria. El impacto de la llegada del SARS-CoV-2 a Uruguay se verá con mayor claridad en el próximo informe que será sobre la actividad en abril, mayo y junio.
El PIB desestacionalizado cayó 0,7 en el último trimestre de 2019 y de 1,6% en este primer trimestre con respecto al último de 2019.