Sofitel Casino Carrasco & Spa recibe a Maximiliano Matsumoto como chef ejecutivo creando un menú que despliega en cada plato sabores únicos logrando fusionar la gastronomía local incorporando su sello oriental e impronta personal a la propuesta de Sofitel Montevideo. Matsumoto es uno de los grandes referentes de la cocina regional, por lo que su llegada genera gran expectativa, elevando los estándares de calidad y dinamizando el mercado nacional.
Maximiliano Matsumoto, es descendiente de japoneses (nikkei), nacido en Burzaco (Buenos Aires). Siempre tuvo gran interés por la cocina, su madre fue su principal inspiración: le preparaba unas costillas de cerdo con jengibre y azúcar que le hicieron descubrir sabores nuevos y diferentes. La pasión por la cocina y las ganas constantes de aprender y crecer lo llevaron a viajar y trabajar con figuras gastronómicas de la talla de Germán Martitegui –dueño de su propio restaurante Tegui, uno de los mejores de Latinoamérica- Tom Aikens – chef inglés ganador de una estrella Michelin- y Peter Gordon- neozelandés pionero en el concepto cocina de fusión que está radicado en Londres donde abrió Theprovidores y The Sugar Club-entre otros.
Su incursión en la cocina profesional fue de la mano de Germán Martitegui, con la propuesta de cenas itinerantes que, fueron todo un éxito. Luego, comenzó a trabajar en el Hotel Faena, para eventos de 500 a 2000 personas y después con Aldo Graziani- reconocido sommelier argentino, impulsor de varios proyectos: Aldo´s Restorán Vinoteca, Aldo´s Winebar, Casa Cruz Brasserie Porteña, Bebop Club y la distribuidora de vinos El Garage de Aldo.
En su largo camino, Matsumoto trabajó como chef ejecutivo de Aldo´s Vinoteca, Aldo’s Wine Bistró enfocados en el descubrimiento y disfrute de vinos argentinos; donde el chef siempre sorprendió con platos y sabores originales para acompañar cada maridaje.
Tiempo después, abrieron el restaurante “Tora”-significa Tigre en japonés- también junto a Aldo Graziani y Lucila Zeballos, con una carta de siete entradas y platos principales, además de tres postres, con una propuesta de fusión y con café vietnamita para los comensales.
Para Matsumoto, es muy importante trabajar en una cocina donde haya disciplina y consciencia del cuidado de los productos, para no desperdiciar alimentos y maximizar recursos.
Será un gusto recibirlos y que disfruten como ya lo han hecho tantos otros comensales en el mundo.