“En la venta del terreno, la Departamental entiende por unanimidad que es contraproducente, que no es lo que la izquierda ha llevado adelante en términos de políticas de convivencia y espacios públicos, más uno como la Rambla. Si bien ese punto no es donde se encuentra a más gente, no deja de ser un espacio público, propiedad y patrimonio de los uruguayos, no solo de los montevideanos. Ese es el concepto central para pedir que no se enajene y solicitar a la Mesa Política que tome el tema”, dijo Otero en No toquen nada.
La Mesa Departamental de Montevideo del Frente Amplio emitió una declaración el pasado 3 de setiembre en la que manifestó “la inconveniencia de la enajenación de los predios que incluye el proyecto” y “la necesidad de la ampliación del debate”.
Otero también dijo que en la Departamental “todos opinan que el proyecto es bueno y necesario, pero que no es necesario vender para que siga adelante”.
Además, dijo que en ese organismo plantean que podría solucionarse con una concesión. “Decimos que no hay ningún tipo de problema con que la concesión sea por más de 30 años, porque no es un tema de tiempo en términos de concesión. Lo que está en discusión es la venta del espacio público”, agregó.
Consultado sobre la viabilidad del proyecto sin la participación de Buquebus, Otero dijo que entendía que el proyecto de esa empresa “es el que mejor le viene al país en tema de transporte”. “La Departamental de Montevideo es muy responsable, sabe que está en juego la conectividad nada menos que con Buenos Aires y el resto de Argentina. Sabemos que quien ha llevado adelante este proyecto, la empresa Buquebus, también tiene un rol importante en nuestro país y en Argentina. No tomamos ninguna decisión basada en que pueda ser otra empresa la que pueda llevar a adelante este proyecto”, mencionó el vicepresidente de la Mesa Departamental.