Así lo plantea un decreto firmado esta semana por el presidente Tabaré Vázquez surgido del acuerdo alcanzado entre empresarios nucleados en Cambadu, los trabajadores, la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev) y el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop).
La obligatoriedad de curso y certificado desde el primero de enero será para repartidores de alimentos y productos de farmacia pero se irá ampliando en el futuro a todos los trabajadores en moto, según lo defina el Consejo Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
El Inefop ya está brindando los cursos que darán lugar a los certificados que se exigirán desde el año que viene.
El inspector general del Trabajo, Gerardo Rey, dijo a No toquen nada en abril de 2016 que una de las motivaciones para avanzar en este terreno es que es un ámbito que ocupa muchos jóvenes y tiene alta siniestralidad.