El Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (Inau) pasará a ser el único órgano competente para la asignación y selección de familias adoptivas y tendrá a su cargo el Registro único de adopción. Los jueces no podrán elegir a los padres adoptivos y los escribanos no habilitarán adopciones con escrituras públicas.
La ley también elimina la diferencia entre adopción simple y plena. En la legislación anterior, sólo los matrimonios podían adoptar en forma plena y el resto debía adoptar de manera "simple", a la que vulgarmente se llama "adopción de segunda", porque, por ejemplo, los niños tienen menos derechos hereditarios.
La nueva ley propone un solo tipo de adopción para matrimonios, parejas y solos, valorando que tengan redes familiares, para que el niño tenga una familia.
La oposición de la iglesia
El Movimiento Familiar Cristiano, vinculado a la Iglesia, solía dar niños en adopción, pero con esta nueva ley quedará impedido para hacerlo.
La Iglesia católica se opone de plano al proyecto porque "desde el Génesis, en la Biblia, se dice que 'Dios los creó varón y mujer'", dijo a la AFP el obispo Pablo Galimbertti.
"Nuestra posición es que la adopción tiene que darse dentro de una familia con una pareja integrada por un varón y una mujer, que son los que están naturalmente capacitados para tener una relación plena", afirmó. Y agregó que "no hay experiencia fundada de que la adopción por homosexuales sea positiva".
Dos puntas del debate parlamentario
El diputado nacionalista Gustvo Borsari explicó a 180 su discrepancia: “Yo no discrimino a nadie. No creo en la discriminación ni en las barreras. Pero sí creo en de orden natural de las cosas y quienes están concebidos en el mundo para concebir son el hombre y la mujer. Ese es el orden natural. Creo que esa es la mejor forma de criar a un niño o niña a ser adoptado. Nadie le niega a una persona homosexual vivir con una persona del mismo sexo. Eso no está en discusión. Está en discusión la crianza de un niño desde que es abandonado”.
Por su parte, el diputado del Frente Amplio, Javier Salsamendi, lamentó que el debate se haya concentrado en la adopción por parte de homosexuales: "el periodista o conductor de un programa tiene derecho de armar el programa como se le ocurra, yo entiendo que hay cosas que venden y otras que no venden. Pero se debería analizar cuál es la situación real de la adopción en este país y que tiene en definitiva que ver con la situación de la infancia”.
Algunos dicen que la nueva ley no habilita a los homosexuales a adoptar
El abogado Juan Andrés Ramírez, docente de la Cátedra de Derecho Civil de la Universidad de la República, dijo en el programa radial No Toquen Nada: “de acuerdo al proyecto de ley, los homosexuales no pueden adoptar” porque el niño debe llevar el apellido del padre en primer lugar y el de la madre en segundo. “Esto quiere decir que los adoptantes son heterosexuales”, resumió Ramírez.