Castellanos se criticó la matriz de las medidas anunciadas por el ministro de Economía, Danilo Astori este lunes, y consideró que se trata de un ajuste.
“El concepto del ajuste podría ser más equitativo. Se carga sobre el trabajo casi la totalidad del ajuste y no se carga sobre otros actores de la sociedad como el capital”, afirmó
En tal sentido, sostuvo que el país tiene una renuncia fiscal de 1.500 millones de dólares anules por Ley de Inversiones, impuestos que no se cobran, etc. “¿Por qué no se podía tocar algo de ahí?”, preguntó.
Sobre los sectores de donde se podía recortar enumeró “el IRAE, la famosa devolución del Fonasa, sectores que ganan 400 o 500.000 pesos a los que todavía se les devuelven una parte del Fonasa”.
“Había posibilidades de repartir el costo de otra manera”, sentenció.
Castellanos dijo que no se tocó el corazón del Impuesto a la Renta de la Actividad Empresarial (IRAE) y que el incremento de las tasas de imposición a los depósitos de capital generaría apenas unos 10 millones de dólares.
En cambio, estimó que el incremento en la imposición por Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que llamó “impuesto a los sueldos”, produciría entre 90 y 110 millones de dólares.
Castellanos también cuestionó la medida de permitir el ingreso de solo dos funcionarios a la administración central por cada tres que se jubilen y llamó la atención sobre los efectos en la inversión prevista para el período. Una de las medidas propuestas por el gobierno es no ajustar por IPC las inversiones previstas para los próximos tres años. Es decir que cada año, al ritmo inflacionario actual se perdería un 10%.
“Nos preocupan aquellos famosos 12.000 millones de dólares (en inversión en infraestructura) que era el buque insignia para los cinco años, para dinamizar la economía. Quisiera ver cuánto queda ahora de ese proyecto que para nosotros era una de las cosas importantes”, dijo Castellanos.