El primer proyecto de Bandas Educativas se dio en 2010 a partir de un llamado de la Comisión del Bicentenario, que buscaba celebrar los hechos de 1811, primer año del proceso artiguista. Realizaron 12 historietas, una por cada mes de 1811, del Grito de Asencio al Éxodo.
Como tuvo buena acogida, continuaron por el camino de los cómics de historia y al año siguiente, gracias a haber ganado Fondos Concursables del MEC, siguieron publicando, contó a 180 Nicolás Peruzzo, uno de los responsables de Bandas Educativas.
Hasta 2013 publicaron cómics que relatan todo el ciclo artiguista y en 2014 realizaron una precuela, contando la juventud de José Artigas, desde que su abuelo llegó para ser uno de los fundadores de Montevideo hasta que el prócer desertó del Ejército español y se unió a la revolución.
Una de las últimas adiciones a la colección es una serie sobre la independencia nacional, la cual incluye tres tiras: una sobre el Desembarco de los Treinta y Tres Orientales en la Agraciada, una sobre la Declaratoria de la Independencia en agosto 1825 y otra sobre la Jura de la Constitución de 1830.
Estos tres y decenas más están disponibles en la web del grupo.
(Fragmento del cómic "El Desembarco de los 33").
Más cerca de Asterix que de Charoná
Peruzzo contó que la idea de Bandas Educativas es contar la historia desde un punto de vista didáctico pero haciéndolo divertido para los niños. Recordó que cuando le hablaban de esos capítulos de la historia se le venían a la cabeza las revistas Charoná o Moñita Azul “que mostraban ilustraciones lúgubres de los gauchos”. Sin embargo, ellos toman más como modelo a cómics como Asterix, “que era muy divertida”, ya que “si bien transcurrían 2.000 años antes, tenían humor y personajes mucho más queribles”.
También, contó que cuando comenzó con esta iniciativa y le comentaba a sus amigos, estos le respondían: “qué buena idea, lástima que sea con la historia del Uruguay que es un embole”. Peruzzo reconoció que “existe esa percepción de que los próceres se paran y dicen frases del Mausoleo”, mucho más solemnes de lo que seguramente fueron.
El autor contó que intentan que los protagonistas de los cómics no sean los propios próceres -salvo en la precuela de la historia de Artigas- y buscan contar la historia desde personajes creados por ellos, con los que los niños puedan sentirse más identificados. Él, en particular, ideó a Atanasio y Ferreira, un dúo de gauchos muy distintos entre sí que acompañan las etapas de la revolución junto a una vaca.
Otro aspecto que los distingue en su búsqueda de un acercamiento más atractivo para los niños es que buscan historias interesantes dentro de los hechos veraces que se relatan. Trabajan junto a la profesora de historia Victoria Saibene, quien hizo algunos hallazgos de relatos no tan conocidos que funcionaron bien en los cómics.
Por ejemplo, encontró una historia sobre el asalto que realizó Artigas en la mitad de la noche a un polvorín ubicado en la Isla de Ratas, apropiándose de toda la pólvora de los españoles. Otro relato poco conocido es el que describe cómo Artigas mandó a Fernando Otorgués a saquear una estancia cerca de donde se desarrolló poco después la Batalla de Las Piedras. Allí, los españoles esperaban aprovisionarse pero este hecho minó su moral.
“La misión es contar un cuentito que sea didáctico pero antes que nada tiene que ser interesante de leer para el niño”, señaló Peruzzo. Además de Saibene, otra de las cabezas del grupo es Alejandro Rodríguez Juele, que así como Peruzzo, es guionista e ilustrador de sus tiras, mientras que ambos editan las que realizan otros autores.
(Fragmento de "Asalto a la Isla de Ratas")
El “papel” del cómic sin papel
“Nuestro proyecto es 100% digital y, en ocasiones, por cuestiones extra a nuestra planificación, terminamos con algún tiraje grande de libros. En este momento tenemos unas 550 páginas publicadas en nuestra web, solamente de historia. Esto sería impagable para dárselo a cada escolar del país en formato de libro. En cambio, de esta forma, todos los escolares tienen acceso a esa página con su ceibalita”, contó Peruzzo.
El autor dijo que las docentes suelen decirles: “qué lindo esto. ¿Cuándo lo sacan en libro?”. Siempre les resultó importante acostumbrar a las maestras a que trabajen con los cómics en formato digital.
Indicó que al formato papel lo usan “casi como un folleto promocional”, ya que los picos de visitas en su web son posteriores a cuando regalan ejemplares papel en eventos como Montevideo Cómics.
De todas formas, los responsables de Bandas Educativas creyeron que el acceso a la plataforma del Plan Ceibal iba a ser mucho más sencilla. “Teníamos una idea algo ingenua de Ceibal, pensamos que era un gran cerebro en el LATU y que haciendo un arreglo con ellos ya se iba a poder acceder a los contenidos desde todo el país”, relató. A pesar de que vieron que el sistema era más complicado, desde el año pasado, los contenidos del grupo están subidos a la Biblioteca Ceibal, en una sección específica de historietas donde sus contenidos ocupan casi el 90% del total, explicó.
Sin embargo, debido a que lo que está en el sitio de Ceibal son links al sitio del grupo, pueden medir qué porcentaje del tráfico del sitio les llega desde Ceibal. “No es tanto como uno supondría. Hay cerca de 400.000 ceibalitas y en nuestra web tenemos cerca de 200.000 visitas, de las cuales el porcentaje que vienen desde Biblioteca Ceibal no llega ni al 30%. Estamos viendo que hay una especie de cuello de botella que no podemos saber a qué se debe”, comentó.
Dijo que existe la posibilidad de que su proyecto no genere tanto interés en el personal docente, pero aseguró que la gran mayoría de comentarios que dejan en su sitio son de maestras que, quizás, se enteraron por el “boca a boca”.
Las raras veces que difunden sus materiales de forma impresa, es debido a que los proyectos por los que los contratan disponen de esa prestación. Por ejemplo, realizaron un proyecto en el que adaptaron la Constitución al formato de historieta, debido a un concurso organizado por el Parlamento en los 30 años del regreso a la democracia. También, realizaron una historia sobre consumo responsable de marihuana y alcohol en adolescentes, por un concurso de la Junta Nacional de Drogas, y otra sobre el Ballet Nacional del Sodre para repartir entre los niños que asistieron a las funciones especiales.
Peruzzo aseguró que cuando reciben fondos los usan en “contratar personas y producir más cómic digital”, ya que “el cómic en papel no es la prioridad y son circunstanciales”.