La Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) recibió una denuncia en noviembre de 2013 por un ataque en el que un paciente resultó gravemente herido por un ataque de perros. Entonces envió un oficio a ASSE para solicitar medidas urgentes para “proteger la integridad física de las personas afectadas”.
La INDDHH no obtuvo respuesta por parte de ASSE. Y en la Comisión de Zoonosis le informaron que solamente tomarían medidas en cuanto a la estirilización, vacunación y dosificación antiparasitaria de los perros.
Serían unos 150 perros que en viven en el predio lindero de la Colonia Santín Carlos Rossi. Entre 2010 y 2013, según la INDDHH, se registraron 158 ataques.
ASSE sí contestó tras una visita de representantes de la INDDHH a las colonias en diciembre de 2013. En la respuesta se reconoció que era una situación que se arrastraba de hace 20 años sin que se lograra erradicarla.
“Se han intentado por parte de esta Administración muchas medidas, y se contactó a todos los organismos posibles (Intendencia, Zoonosis, Organizaciones protectoras de animales, Juzgados, Ministerio del Interior, Ministerio de Ganadería) para resolver el tema. Se planteó planificar la eliminación de perros agresivos, pero no se permitió debido a la demanda de organizaciones protectoras de animales. El problema no termina de solucionarse a pesar de las múltiples acciones porque se continúa 'tirando' cachorros en el predio”, señaló la respuesta de ASSE.
Sin resultados, la INDDHH volvió a plantear el tema en octubre de 2014. La muerte de este paciente esta semana demuestra que la situación continúa sin solución.