La protagonista de Pulp Fiction reapareció en la presentación de la miniserie que protagoniza para la NBC, The Slap. Y los medios marcaron inmediatamente las diferencias en su rostro: menos anguloso y con ojos “achinados”.
Si bien ella no lo reconoció, es unánima la apreciación de que pasó por el quirófano.
El caso recuerda el de otras actrices como Renée Zellweger, Catherine Zeta-Jones o Nicole Kidman quienes han “sufrido” transformaciones también criticadas.
