Producción: José Benítez, de No toquen nada.
La ley se aprobó con los cambios que realizó el Senado y la norma pasó al Poder Ejecutivo para su promulgación. El texto aprobado tiene errores que complican la aplicación, algo que fue reconocido por los legisladores oficialistas, quienes ahora tienen 90 días para hacer una ley que solucione estos problemas.
La votación terminó con cantos de "Uruguay, Uruguay" desde las barras. Además, también corearon "igualdad, igualdad".
El primer orador fue el diputado Jaime Trobo. La intervención fue para denunciar que en edificio anexo del Poder Legislativo había dos “identificativos” de apoyo al matrimonio igualitario.
Quienes le respondieron fueron los diputados socialistas Roque Arregui y Daysi Tourné.
Luego de este intercambio comenzó el debate del proyecto. Como no había un diputado designado como miembro informante, el diputado José Bayardi, que forma parte de la Comisión de Constitución y Legislación explicó los errores con los que vino el proyecto del Senado y dio los motivos por los que el Frente Amplio decidió aprobarlo de todos modos. Luego, en un plazo de 90 días, se aprobará otra ley con las correcciones.
Estos errores llevaron a que varios legisladores que lo habían votado en diciembre esta vez no lo votaron. Uno de ellos fue el diputado de Vamos Uruguay Gustavo Cersócimo, quien dijo que el proyecto debería ir a la Asamblea General.
Casi todos los diputados estaban de acuerdo que el proyecto que vino del Senado era peor que el que voto la Cámara de Diputados en diciembre. Eso fue explicitado incluso por el oficialismo. Llevarlo a la Asamblea General implica que se tenga que votar por mayoría especial. Jorge Orrico dijo que eso no le daba garantías a la bancada oficialista de que el proyecto sería aprobado.
Orrico dijo que los errores no eran el "acabose" y que la "esencia del pensamiento del Frente Amplio" estaba representada en el proyecto.
Incluso en la oposición generó distintas posturas, el diputado Fitzgerald Cantero, también de Vamos Uruguay, dijo que no valía la pena correr el riesgo que no se apruebe.
Pero como pasó en diciembre, también hubo cruces respecto al tema de fondo. El primero que se manifestó en contra fue el nacionalista Gustavo Borsari, que había presentado un proyecto de “Unión Civil”.
El colorado Fernando Amado dijo que el debate respecto a la Unión Civil es un tema filosófico y político.
Pablo Abdala, del Partido Nacional, planteó que está de acuerdo en satisfacer los reclamos de de los grupos sociales que piden el matrimonio igualitario, pero que este proyecto no es la única forma de contemplarlos.
La diputada Daysi Tourné dijo que la ley que se estaba votando “revolucionaba conceptos”.
De los discursos más duros en contra de la ley fue el del diputado blanco Gerardo Amarilla. Leyó la proclama de la Asociación Cristiana Uruguaya de Profesionales de la Salud y el Instituto Jurídico Cristiano del Uruguay. Amarilla dijo que la concepción natural del matrimonio es entre un hombre y una mujer.
La diputada de la Cap L Valeria Rubino, que además es activista del Colectivo Ovejas Negras, fue la que tuvo el discurso más duro, cuestionando a los que votaron en contra de la ley.
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