Luego de la votación, sentada afuera del Parlamento, Michelle Suárez fue saludada por muchos de los que asistieron a la votación. Ella es integrante del colectivo Ovejas Negras y cuando se recibió se convirtió en la primera abogada trans del Uruguay.
Ella presenció toda la discusión de principio a fin y escuchó cuando se la mencionó y se la citó por ser la redactora del proyecto. "Que me hayan permitido trabajar el proyecto con libertad y dejarme consultar a todos, para mí ya de por sí implicó ejercer el derecho para lo que siempre creí, que es igualar situaciones que son injustas", señaló.
"Es una inmensa alegría desde el punto de vista más íntimo. Estudié derecho para esto, en el fondo, cuando alguien elige amar el derecho, el más profundo de los objetos que se trabaja es la justicia. Si hay un proyecto que logra eso para sectores excluidos de derechos, te sentís plena con la carrera que elegiste", señaló.
Durante la discusión hubo argumentaciones a favor y en contra, pero Suárez dijo que también escuchó algunas que no tenían que ver con el texto propuesto, sino con la legislación actual y con lecturas equivocadas. "Se discutió que este proyecto permitía la adopción y eso está permitido desde 2009, las parejas homosexuales o personas del mismo sexo en unión concubinaria o solteras pueden adoptar en pie de igualdad con familias hetero-parentales. Eso es un desconocimiento de la legislación actual y eso me preocupa, no como abogada o integrante del colectivo Ovejas Negras, sino como ciudadana. Las personas que están acá nos representan y, por lo tanto, lo mínimo que podemos pedir es que conozcan la legislación vigente", afirmó.
