La semana pasada, a través del colectivo Cotidiano Mujer, las trabajadoras inmigrantes denunciaron a la dueña de una residencia en Carrasco en la Justicia por la violación de sus derechos.
Graciela Espinosa, integrante del sindicato, dijo que esto repercutió en algunos empleadores que quisieron echar a sus trabajadoras domésticas inmigrantes. "Me llamó una patrona y me dijo que iba a echar a dos peruanas por el tema de las bolivianas. Yo le pregunté por qué y me dijo que era por las inspecciones que está haciendo el Ministerio de Trabajo, pero cuando le dije si estaban ilegales, me dijo que no y que estaban registradas en el BPS. Entonces no tiene problema ninguno, le expliqué", contó.
Sobre el caso particular de las bolivianas, Espinosa dijo que es difícil detectarlas porque son más "escurridizas". "Es una trabajo complicado porque son trabajos de puerta para adentro y no podemos ir a buscarlas. Son escurridizas esas compañeras, ellas ven PIT-CNT o una bandera y se esconden, pero nosotras tenemos que seguir esperando. Las puertas de nuestro sindicato están abiertas para las inmigrantes, las uruguayas y las ONG", señaló.
Una trabajadora doméstica que dormía en el balcón
Espinosa dijo que esta denuncia de las trabajadoras bolivianas no las sorprendió porque conocían situaciones de violación de derechos en otros barrios e incluso el interior del país. Incluso mencionó un caso registrado el año pasado con una trabajadora uruguaya en Maldonado.
La empleada que fue contratada a través de una agencia y la hacían dormir en el balcón. "Lo detectamos el año pasado en Maldonado y se hizo la denuncia. La compañera se fue de la casa y se fue al interior. Fue un despido indirecto, se le pagó el salario vacacional y licencia. La habían contratado a través de una agencia, que fue multada y este año no va a funcionar", contó.
De "siervas" a trabajadoras
Este domingo es el día de la trabajadora doméstica. Es feriado no laborable pago para todas las trabajadoras, según lo indica la ley 18.065, que les otorgó los mismos derechos que al resto de los empleados del país.
Además, desde el 2008, las trabajadoras domésticas tienen consejos de salarios y hasta el año pasado había más de 60 mil puestos cotizantes ante el Banco de Previsión Social.
"La evaluación que nosotros hacemos es positiva, a pesar de las cosas negativas. Se aprobó la ley y el primer convenio en 2008, el segundo convenio en 2010 y la ratificación del convenio 189 de la OIT. Hoy somos trabajadoras y antiguamente éramos las sirvientas o las siervas, como muchos nos decían. Hoy somos trabajadoras y nos tienen que respetar nuestros derechos", dijo Espinosa.