Kan, de 63 años, viceprimer ministro saliente, es el único peso pesado del Partido Demócrata de Japón (PDJ, centro-izquierda) que se declaró candidato a la presidencia del movimiento, mayoritario en el Parlamento.
El nuevo jefe del PDJ será designado el viernes en una votación interna y el ganador tiene asegurada la dirección del Gobierno después de la dimisión de Hatoyama el miércoles por su desastrosa gestión del prometido traslado de una base norteamericana y por escándalos de financiación oculta.
Los pretendientes tienen hasta este jueves por la noche para darse a conocer, pero las dos personalidades capaces de inquietar a Kan en la votación, los ministros de Relaciones Exteriores, Katsuya Okada, y Transportes, Seiji Maehara, anunciaron que no se presentarán.
Okada, de 56 años, se reunió con Kan y declaró luego que el nuevo primer ministro debería solucionar los problemas de financiación política del PDJ y dirigir el partido con autoridad. "Si se dan estos dos factores, apoyo a Kan", precisó a la prensa, y añadió que desea seguir como responsable de Exteriores.
Los principales reproches a Hatoyama han sido su falta de decisión y sus cambios respecto a sus promesas electorales.
Maehara, de 48 años, se limitó a declarar que "apoyará a Kan".
Hatoyama desempeñaba el cargo sólo desde septiembre, cuando fue designado tras la aplastante victoria del PDJ en las legislativas de agosto, que acabaron con la dominación conservadora durante más de 50 años.
