El informe habla de un “proceso de recuperación en términos de crecimiento real de ventas en la mayoría de los casos (que) ha sido lento y gradual, coexistiendo incluso sectores que alcanzaron un crecimiento destacado (Automóviles y Motocicletas particularmente)”.
También señala un escenario de mejora de expectativas en los empresarios encuestados ya que un 83% visualiza un comportamiento “regular” o “bueno” para 2018 frente a sólo un 17% que prevé un escenario negativo (“malo” o “muy malo”).
“Las tres cuartas partes de los sub sectores analizados registraron un crecimiento real en sus ventas en comparación con el año anterior. Es decir de los 28 sub sectores relevados 7 atravesaron un escenario contractivo, mientras que al cierre del 2016 de los 28 sectores, 20 registraron caída”, explicó.
Según el informe, el escenario “se fundamenta en la mejora del poder adquisitivo de los hogares tras la reducción en los niveles de inflación respecto a años anteriores, la disponibilidad creciente de crédito al consumo, la estabilidad del valor del dólar que permite un abaratamiento de los bienes de origen importado, y la relación de precios con los países vecinos que ha mantenido cierta paridad”.
“Sin embargo, el gran desafío consiste en lograr recuperar los niveles de rentabilidad de las empresas en general, que pese a la recuperación parcial que han mostrado las ventas reales en algunos casos, los empresarios manifiestan una gran preocupación respecto al incremento de costos que enfrenten en su actividad”, agrega el informe.
El informe realiza dos advertencias. La primera refiere a la Ronda de Salarios que involucrará a más de 200 mesas sectoriales en los próximos meses. Se plantea que “el principal desafío tanto para las autoridades, como para los trabajadores y los empresarios, será negociar nuevas pautas de ajustes salariales que permitan alcanzar mayores niveles de creación de empleo”.
Además, señala que la Rendición de Cuentas no debería traducirse “en nuevas disposiciones que tengan como único fin aumentar la recaudación fiscal, vía el aumento de la carga que debe enfrentar el sector privado”.