El centro, ubicado en Bulevar Artigas y General Flores, fue inaugurado el pasado 22 de abril. En setiembre se estrenó el sector denominado "Centro de Seguridad".
Durante la visita del INDDHH los jóvenes "se encontraban alterados e indignados por la comida que se les daba", dice el informe, que fue dado a conocer por El Observador este jueves.
La cena era un guiso de fideos que "estaba quemado y los fideos apelmazados y pegados en el fondo de la olla". Los adolescentes manifestaron que "la comida es poca y de mala calidad".
En uno de los salones había un cartel escrito por los adolescentes colocado frente a una cámara de seguridad: "TENEMO AMBRE JULIO", en referencia al director del centro, Julio Barreiro. Los funcionarios presentes "se dirgieron de forma inadecuada" al equipo del INDDHH cuando estos tomaron la foto del cartel.
Los jóvenes tienen dificultades de acceso a jabón y los dejan cepillarse los dientes dos veces al día, pero no después de cada comida. También se constató la carencia de papel higiénico.
Además no pueden tener televisión, DVD, reproductores de CD. Tampoco hay televisión en los espacios colectivos ni actividades "más allá de alguna actividad física o de recreación".
Los adolescentes reciben una visita de una hora por semana y pueden realizar una llamada de seis minutos o dos llamadas de tres.
La vestimenta proporcionada por el centro consta de una remera y una bermuda. La primera se cambia cada dos o tres días y la segunda cada 15.
