Lacalle Pou eligió cerrar su campaña en Las Piedras. En ese lugar, hace 16 años, comenzó su carrera política con una reunión de la que participaron 14 personas.
El primero en hablar fue Jorge Larrañaga, su compañero de fórmula.
El candidato a vicepresidente dijo que tenía "la misión de unir a los uruguayos". "Hoy nuestras banderas nacionalistas saludan a los compatriotas de todo el país: blancos, colorados, frenteamplistas, independientes. Absolutamente a todos", expresó.
El acto se transmitió a través del canal VTV y de internet. Larrañaga le habló a quienes estaban siguiendo el acto en todo el país como "hombre del interior". "Asumo la condición de hombre del interior para impulsar un proyecto de país descentralizado, con desarrollo nacional integral para todos los uruguayos. Pretendo ser el presidente del Parlamento de este país, quiero ser vicepresidente de los uruguayos para que la democracia vuelva a tener por eje el Parlamento de la República donde ningún partido va a tener mayorías parlamentarias", sostuvo.
Lacalle Pou siguió el discurso de Larrañaga con la bandera de Uruguay en una de sus manos y con la otra tomó la de su esposa Lorena Ponce De León.
Luego, cuando hizo su discurso de cierre, el candidato a presidente se refirió a la disputa entre posiciones "antagónicas que se quiso mostrar". "Quizá eso ha sido lo que sorprendió a más de uno, de buenos contra malos, de rico contra pobre, de patrones contra obreros y nunca entendieron que de alguna manera todos nos cruzamos, todos nos queremos y nos necesitamos", expresó.
Lacalle Pou señaló que a partir del domingo 26 "nace un nuevo tiempo". "No estamos solo, como dijo alguien, ante una época de cambios. Estamos ante algo más profundo que es un cambio de época y eso va a demandar de los gobernantes adecuarse, adaptarse y hacer algo que en algún momento se me criticó y puede prestarse para una supuesta contradicción. Quien pretenda gobernar, deberá prever, anticiparse a los problemas y sobre todo a los desafíos. Deberá ser un experto en lo nuevo, en pensar lo que todavía no pasó, en lo que pasa en otros lugares del mundo, estudiar patrones históricos y la capacidad de ser un loco que sueña, que piensa, que innova, pero al mismo tiempo la cordura de seguir adelante con esos sueños de la realidad, que es la parte más difícil de la actividad de gobierno", afirmó.
El candidato presidencial dijo que después de la primera vuelta "ya no será solo un candidato del Partido Nacional" y que "caminará hacia el distinto para buscar coincidencias, más que diferencias". "Después del 26 de octubre tendremos que representar a gran parte de la mayoría social", agregó.
Lacalle Pou cerró su discurso dando la razón por la que quería ser presidente. "No se trata de sacar a nadie, se trata de venir y modificar, de cambiar. No es porque los otros son malos, es porque queremos ser mejores. Por eso, en este Uruguay unido por la positiva, quizás con el futuro un poquito más cerca, le pido, sobre todo a los dirigentes, que separemos la euforia de la política, cuánto más arriba se está en la escala política, se tienen más responsabilidades y menos privilegios. Les repetimos lo que les dijimos un día, y confiamos en que estamos más cerca de conseguirlo, no venimos a quitarle las mayorías al Frente Amplio, vinimos a gobernar ahora y a gobernar bien", concluyó.
