Precios del boniato y el zapallo complican las comidas de olla

Algunos productos básicos de la canasta de invierno, como el zapallo y el boniato, aumentaron sus precios en el mes de junio y tienden a ir en ascenso. Alfredo Pérez, de la Unidad de Información del Mercado Modelo, explicó que "va a empezar a escasear la oferta y los precios van a ser aún más altos”.

Actualizado: 22 de julio de 2014 —  Por: Redacción 180

Precios del boniato y el zapallo complican las comidas de olla

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Tanto el boniato en sus distintas variedades, como el zapallo que se distingue con la venta de calabacín, son productos importantes en la canasta fruti-hortícola, sobre todo cuando se trata de comidas de invierno.

Alfredo Pérez, de la Unidad de Información del Mercado Modelo, dijo a No toquen nada que el boniato se encuentra en el quinto lugar de la canasta y el zapallo en el séptimo. “Están dentro de los primeros frutos cuando vas a comprar y más en esta época”, aseguró.

En lo que respecta al boniato, Pérez explicó que la cosecha se realiza una única vez al año, entre febrero y marzo, y que el producto que obtienen es el que se consume durante todo el año. “Contamos con ese boniato conservado para el puchero y para todas las comidas”, señaló.

Según el último informe del Mercado, la zafra de boniato de este año tuvo el volumen más bajo de los últimos 10 años.

El precio del boniato subió un 15% en el mes de junio y un 68% en relación al mismo mes del año anterior. Además, se prevé que en agosto la oferta disminuya, los precios aumenten y haya que importar para suplir la demanda.

“Por la cantidad de boniato producido y el consumo que ha sido bastante constante, a precios altos incluso, pensamos que ese boniato va a empezar a escasear y los precios van a ser aún más altos”, manifestó Pérez.

Las condiciones del clima en el primer período del año también incidieron sobre la producción. En el caso del zapallo, que se cosecha una única vez al año a mediados de mayo, “lo viene afectando negativamente en cuanto a la conservación” y tiene que durar al menos un año, mencionó Pérez.

Hasta el momento, la oferta del zapallo mantuvo precios similares en relación al año anterior. Las ventas mayores se dan con el calabacín, que representa un 32%; se posiciona por tener cáscara fina y fácil cocción, pero a la vez tiene baja aptitud de conservación.

“Pensamos que en los próximos meses también va a tener un incremento importante en los precios por una merma significativa en la oferta y va a haber que recurrir a zapallos de la región para poder suplir un poco la oferta”, indicó Pérez.