La compra de dos millones de dólares fue tramitada de forma secreta por el gobierno y aumenta significativamente la capacidad de intervención de la policía en líneas telefónicas y otros dispositivos de comunicación.
“Nadie puede interceptar por sí mismo sino que lo tiene que hacer con personas especializadas de las compañías telefónicas que solo intervienen si hay una orden judicial. Este equipo, además, es un auditable, se puede ver exactamente qué está haciendo y ese fue uno de los motivos por los que fue elegido. La libertad de las personas no se ve afectada por este equipo que permite que en lugar de que haya 21 equipos de la Policía, solo lo haga uno y tenga un control mucho mayor”, afirmó Bonomi.
Este lunes, después del Consejo de Ministros, el secretario de Presidencia, Homero Guerrero, dijo que se mejora la tecnología pero se mantienen las garantías que existen hasta ahora para los ciudadanos. “Este sistema lo que hace es centralizar más las investigaciones por medio de telecomunicaciones y va a dar mayores garantías a quienes sean objeto de ellas. La tecnología es mucho más avanzada de la que tenemos en Uruguay. Se va a seguir con orden del juez competente o a pedido del fiscal, con el consentimiento de la empresa de telecomunicaciones. Siguen las garantías de siempre”, sostuvo.