A las seis y media de la tarde de este lunes comenzó la ocupación. Aproximadamente 70 personas entre docentes, padres y alumnos participan de la protesta.
“A esta situación hace 13 años la venimos padeciendo”, dijo el profesor Claro. “Es una situación de hacinamiento, de uso de espacios que no son áulicos, que no son salones, que se han convertido en salones. Al principio comenzó como una situación de emergencia en el 2000” pero “hasta la fecha seguimos igual”, señaló.
“Esta es una ciudad que tiene uno de los mayores crecimientos demográficos del país”, por lo que la sobrepoblación de alumnos es el principal problema. “Tenemos 15 grupos en la tarde, 16 en la noche y tenemos 9 salones. Hay clases en la noche con más de 70 alumnos”, dijo el docente.
“Esto no es de hace dos meses, no es de hace un año, por eso decidimos tomar esta medida poco feliz pero necesaria para que de una vez por todas se ponga en agenda este liceo”, señaló Claro, quien es docente de esta institución desde hace 15 años.
“Pasan las administraciones sin haber una respuesta concreta, precisa. Todo son promesas. Estamos cansados de hablar con diferentes consejeros”, agregó.
Además, los docentes aseguran que en el liceo padecen “inseguridad interna”. “En el turno vespertino tenemos 500 alumnos en un espacio en que hoy somos 70 y estamos medio apretados. Eso conlleva a infinidad de roces producto también de la zona carenciada en lo social y económico. Todos los alumnos traen sus problemáticas acá adentro, más aún si continuamente hay roces, fricciones, choques”, dijo Claro.
“Cuando toca el timbre y salen de los salones, para pasar por la puerta y salir afuera, es como si fuera una estampida de gente, que si no estás bien parado te tira”, agregó.
También hay “violencia interna” que involucra agresiones entre los estudiantes e incluso hacia los profesores. Recientemente se encontró en la puerta del liceo a personas con “una actitud sospechosa”. “Creo que estaban pasando alguna clase de estupefaciente”, señaló Claro, por lo que “se charló, previa denuncia, para que se alejaran, pero quisieron ingresar”. En el turno de la noche el liceo cuenta con dos adscriptas y la subdirectora.
La ocupación será por tiempo indeterminado a menos que “las autoridades hagan suyo este reclamo de forma seria, concreta, mediante un compromiso firmado de ponernos agenda; o vendrá el Ministerio del Interior a desalojarnos, lo cual haremos pacíficamente y como debe ser”, explicó Claro.
En el caso de que la policía los desaloje y no haya respuesta, “mañana ocuparemos de nuevo”, aseguró el profesor.