Según Lula, en los últimos diez años, cuando la mayoría de los países de la región completó una década de crecimiento económico, todos, a su manera, atacaron "la enorme deuda social".
"¿Está resuelto el problema? Claro que no. Empezamos a resolver el problema. Pero hubo sí avances extraordinarios", dijo el expresidente, al participar junto al mandatario uruguayo, José Mujica, y el secretario general de la Confederación Sindical de Trabajadores de la Américas, Víctor Báez, de un debate sobre "perspectivas y tensiones del progresismo en América latina" organizado por la Fundación Friedrich Ebert en Uruguay.
Lula advirtió que para mantener este camino no se debe permitir el regreso de los gobiernos conservadores, hay que continuar con las políticas de recuperación, mejorar las condiciones de los más pobres del continente y seguir generando empleos.
"Nunca hemos crecido tanto como lo estamos haciendo ahora, nunca conquistamos tanto espacio democrático como lo hemos hecho en los últimos 10 años. Nunca he visto a América Latina avanzar tanto como lo ha hecho en los últimos 10 años", enfatizó. Pero "todavía es muy poco con respecto a todo lo que nos resta por hacer".
Según Lula, nunca en la historia de América del Sur y de América Latina ha habido "la calidad de los gobernantes que hay hoy en el continente".
"Es importante que tengamos eso en cuenta, es importante que avancemos cada vez más, los dirigentes sabiendo que no hay ninguna conquista que satisfaga a los trabajadores 100%", sostuvo.
Advirtió además que los movimientos sindicales "no pueden perder esta oportunidad".
Tanto Lula como Mujica defendieron la importancia de la integración regional, aunque admitieron que hay obstáculos para mejorarla.
"En los ocho años que fui presidente de Brasil hice lo que pude para que hubiera una integración más fuerte entre los países latinoamericanos. Pero tenemos que ser pacientes, hay que enfrentar muchos obstáculos", sostuvo Lula.
Según el expresidente, aunque el Mercosur "todavía tiene algunas deficiencias se está consolidando cada vez más".
Por su parte, Mujica sostuvo que la integración "necesita menos burocracia y más responsabilidad" y llamó a Brasil a "cumplir una responsabilidad histórica" de liderazgo en la región.
