"No a la Re-Reelección", rezaban pancartas llevadas por ciudadanos de clase media que se movilizaron en Buenos Aires hasta la histórica Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, al margen de los partidos políticos de oposición a la presidenta peronista Cristina Fernández.
Otros mitines similares de protesta se realizaron en las ciudades de Rosario, Córdoba, Mendoza y Mar del Plata y Bariloche.
La iniciativa re-reeleccionista es impulsada por el movimiento de intelectuales kirchneristas Carta Abierta, pero la mandataria nada ha dicho al respecto y tampoco se pronunciaron a favor sus ministros y los líderes parlamentarios oficialistas.
"En el lugar que me toque, haré lo que siempre he hecho, militar y trabajar, porque otra cosa no he hecho en mi vida. Nerviosa no me voy a poner ni me van a poner", dijo Kirchner en un acto de ampliación de una fábrica en la ciudad de San Juan (oeste), en respuesta a jóvenes partidarios que pedían otra reelección.
Kirchner asumió por primera vez en 2007 y fue reelegida en 2011 para un segundo período de cuatro años, pero la Constitución reformada en 1994 impide un tercer mandato por lo que sólo otra modificación podría permitirlo.
El gobierno precisaría una mayoría especial de dos tercios de los diputados y senadores para reformar de nuevo la Constitución, apoyo que actualmente no tiene en el Congreso pese a que logra quórum en ambas cámaras.
Otro motivo de malestar en sectores con cierto poder adquisitivo es el impedimento para comprar dólares u otras divisas, que según el gobierno necesita para solventar importaciones de hidrocarburos, pagar deuda pública y mantener reservas monetarias por arriba de 45.000 millones de dólares.
Además, el miedo a la acción de asaltantes cada vez más temerarios se acrecentó luego de una serie de crímenes, como las nueve muertes registradas en los últimos tres meses en la periferia sur de Buenos Aires, según estadísticas policiales.
Algunos manifestantes golpeaban cacerolas, una de las formas de protesta tradicionales de los sectores de la clase media argentina.
En octubre de 2013, dos años antes del fin del mandato, se celebrarán elecciones de renovación de la mitad de los diputados y un tercio del Senado.
Encuestas preliminares privadas anticipan un descenso en el caudal de votos del oficialismo, que logró 54,11% de sufragios en las presidenciales del año pasado.