Sijs, recurrentes víctimas de racismo en EEUU

El tiroteo en un templo sij en Wisconsin (norte), que dejó seis muertos el domingo, enlutó a esta comunidad cuyos miembros son muchas veces confundidos con musulmanes radicales debido a sus turbantes y su barba, y que desde los ataques del 11 de septiembre han sido muchas veces víctimas de racismo.

Actualizado: 06 de agosto de 2012 —  Por: Redacción 180

Sijs, recurrentes víctimas de racismo en EEUU

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Las autoridades buscaban este lunes los motivos que llevaron al presunto autor de los disparos, identificado como Wade Michael Page, de 40 años y exsoldado del ejército estadounidense especializado en operaciones psicológicas, a cometer este crimen.

La religión sij nació en India en el siglo XVI de la mano del Gurú Nanak y exige a sus miembros no cortarse nunca el pelo. Los hombres, además, deben cubrir el cabello de la cabeza con un turbante y dejar crecer su barba, por eso son confundidos muchas veces con musulmanes radicales.

Se calcula que en Estados Unidos viven entre 500.000 y 700.000 sijs, que desde los atentados del 11-S han visto como los ataques racistas en su contra han aumentado.

Según datos de la Coalición Sij de Washington, se han registrado unos 700 actos racistas contra miembros de su comunidad desde esa fecha.

El ataque de Oak Creek, donde se encontraba el templo atacado en Wisconsin, es el más grave de la historia reciente contra la comunidad sij, explicó a la AFP Kavneet Singh, director general del Fondo Estadounidense de Defensa de los Sijs.

"Es una auténtica tragedia para esta gente atacada en sus casas o en sus lugares de culto, en un país fundado sobre la libertad de religión, de los derechos cívicos y los derechos humanos", deploró Singh.

Algunas muestras de reconocimiento

En 2001, cuatro días después del 11-S, Balbir Singh Sodhi, propietario de una gasolinera en Arizona (suroeste), fue asesinado por un hombre que dijo querer matar a un musulmán.

Esta muerte fue ampliamente condenada en el país, pero una década después, un abogado de Arizona quiso borrar el nombre de la víctima de un memorial del 11-S en ese estado, alegando que los crímenes racistas tras el 2001 son mitos.

Pero los actos violentos se han multiplicado desde entonces, lo que llevó a un centenar de magistrados a pedir en abril al Departamento de Justicia que actualice la base de datos sobre actos racistas.

Desde hace un tiempo, los miembros de la comunidad sij se quejan de ser atacados cada vez con más frecuencia, desde ser insultados en las escuelas a sufrir cacheos en sus turbantes en los aeropuertos.

Este año, una familia sij de Virginia (este) fue amenazada por carta si no abandonaba Estado Unidos. La gurdwara -como también se conoce a los templos sijs- que se está construyendo en Michigan (norte) ha sido asaltada.

El año pasado, dos sijs de avanzada edad fueron asesinados en un suburbio de Sacramento (California), en el mismo lugar donde meses antes un taxista de la misma religión recibió una paliza de unos asaltantes que profirieron insultos racistas.

Pero los sijs estadounidense también han recibido muestras de reconocimiento. El presidente Barack Obama incluyó por primera vez en 2009 en las celebraciones del calendario de la Casa Blanca la fecha del nacimiento del Gurú Nanak.

El ejército estadounidense ha comenzado a permitir que los sijs sirvan guardando sus signos religiosos y en mayo Washington se convirtió en la primera gran ciudad del país en permitir que miembros de esta comunidad ejerzan como agentes de policía usando su característico turbante.

Obama condenó el tiroteo y alabó a esta comunidad, que "enriquece" Estados Unidos. Su adversario republicano a las presidenciales, Mitt Romney, también reprobó la masacre, "una tragedia no debería producirse nunca en un lugar de culto".