Imaginen que Peñarol, Nacional y la selección uruguaya fueran dirigidos por técnicos extranjeros de la misma nacionalidad. Y por si fuera poco que dos entrenadores de ese mismo país dirigieran a Defensor y Danubio. Sería extraño. Algo así pasará en el fútbol paraguayo con entrenadores uruguayos.
Tras la confirmación de lo que adelantó el 12 de junio 180 respecto de que Gerardo Pelusso sería el sustituto de Francisco Arce al frente de la selección guaraní y la llegada de Gregorio al banco de Olimpia, los técnicos uruguayos coparon los lugares más importantes del fútbol paraguayo.
A Pelusso en la selección y Gregorio en Olimpia se suma Jorge Fossati en Cerro Porteño, el otro grande.
Además, Libertad, el club más laureado de los últimos años en Paraguay, será dirigido por Israel y Guaraní, otro de los equipos chicos más notorios, contrató a Diego Alonso.
