En la circular, la ONSC aclara que la edad es un factor más, de los muchos que existen para delimitar un perfil. Además se explica que es un criterio válido, si es bien utilizado; y que por el impacto social que genera, es necesario reservarlo para aquellos casos en que se pueda fundar claramente el criterio, y se perciba como razonable, justo o lógico y no discriminatorio.
La ONSC aclara que la edad será una exigencia sólo en casos donde haya un "grado de esfuerzo físico a realizar, como sucede con los trabajadores de la construcción, o tareas que exigen cierto dinamismo o esfuerzo más asociados a la juventud".
La subdirectora de la oficina, Ana Ferraris, explicó a que el criterio es no poner tope de edad para el ingreso a la función pública en las distintas modalidades que la ley prevé. "Si para estos puestos de trabajo la edad no es relevante, vamos a intentar generar condiciones para que sea abierto a todos. Se presentarán mayores de 40 años y ganará el mejor, el tema es que haya igualdad de condiciones", señaló.
Esta medida se regulará a través del portal Uruguay Concursa, manejado por la ONSC. Allí se reciben lo llamados de los ministerios y luego se publican.
Uruguay Concursa administra el sistema de reclutamiento y selección de personal para los incisos que van desde el 02 al 15 en el presupuesto nacional, donde hoy hay unos 76.658 funcionarios. Esto es sólo en la Administración Central, pero en total hay más de 270 mil funcionarios en los organismos constitucionales, si se suman los que van desde el inciso 16 al 98 (Poder Judicial, ANEP, Udelar, INAU y otros), entes, intendencias y las Juntas Departamentales.
Reclamos
Varios sectores sociales habían reclamado una medida de este tipo, pero el principal en este sentido había sido del grupo Retornados a Montevideo, que nuclea a uruguayos que volvieron al país.
Fernando Berasain, representante del Ministerio de Trabajo que se encargó de trabajar con los retornados, explicó a No toquen nada que luego de instalarse, la principal necesidad de esos retornados está en el plano laboral. "Los uruguayos están retornando masivamente entre los 45 y 65 años, aunque tenemos de más años. Se encuentran con un problema de inclusión laboral y eso es real. Algunos vienen con buena capacitación y certificación. A esos les resulta más fácil que a otros que tienen experiencia y no pueden certificarlo", explicó Bresain.
Además, pesan las necesidades que hoy tiene las empresas. "Sé que es doloroso, pero lo que nos solicitan es mano de obra. Para un uruguayo que es sanitario, soldador o tiene un oficio es más fácil conseguir trabajo que para un arquitecto o un abogado, porque un profesional de 50 años tiene los mismos problemas que uno recién recibido en Uruguay", señaló.
El desafío de incorporar jóvenes
Esta apertura del Estado a incorporar gente de edad avanzada puede presentar un problema. Hoy el promedio de edad de los funcionarios de la Administración Central ronda los 50 años.
Por eso la ONSC ha destacado una necesidad de renovación. Por ejemplo, hace un par de semanas se lanzó el programa Yo Estudio y Trabajo donde se becó a 600 jóvenes para que ingresen al Estado y tengan su primera experiencia laboral.
Ferraris dijo que la ONSC quiere ir un paso más y su idea es impulsar la contratación fija de jóvenes a partir de los 16 años. "Hay experiencias exitosas, como la del Banco República, donde ingresaron en determinada época jóvenes de 16 años e hicieron la carrera. Hoy, un chico de 16 años que maneja las herramientas informáticas con mucha versatilidad estaría en condiciones de ingresar y prestar servicio en la administración pública. Esto sería acorde a su edad. Nos parece que es viable y legalmente es posible, por eso hay que pelear por incluirlos", expresó.