En el camarín del Teatro Solís, los integrantes del Club de Tobi entran y salen del ensayo, se prueban la ropa que usarán el día del recital y, en el medio, participan de esta entrevista. Empezaron tocando en la calle y este año ganaron el Graffiti a mejor disco de música instrumental, se fueron hasta Cuba a representar a Uruguay y compartieron escenario con Charly García en Argentina.
La banda cambió su composición en estos 15 años, pero decidieron tomar un momento como lo que ellos llaman “el inicio del proceso tobista”. Les interesaba devolver el violín a la música popular, que el instrumento no estuviera asociado únicamente a lo clásico y que pudiera verse como algo entretenido.
Fernando Rosa (violín): Hace 15 años nos conocimos con Mario (violín) y nos pusimos a tocar el violín en la calle, en la Peatonal Sarandí, los jueves, después del ensayo de la Orquesta Juvenil. Era más que nada por diversión, pero a la gente le llamaba la atención, se paraba a escucharnos y eso fue lo que nos motivó a seguir. Yo recién hacía seis meses que había empezado a tocar el violín, me imagino que tocaba cualquier cosa. Mario tocaba desde siempre.
Con el tiempo le han dado más espacio a lo que componen ustedes, aunque sus temas más conocidos son versiones. ¿Cómo han manejado esto? ¿Qué fue lo que más cambió en estos años?
Fernando: El primer tema del primer disco fue de autoría de los cuatro. Fue el primer y último tema de los cuatro. Después sí, incluimos cada vez más temas propios.
La gente inevitablemente va madurando, para bien o para mal. Hay algunas características que van a perdurar en el tiempo, un tobismo, una forma de ser, pero otra cosas cambiaron, por ejemplo, en el último disco hay muchos más temas tranquilos, los temas homenajeados –las versiones–, no son música que escucha gente menor de 20 años… son temas viejos, como nosotros.
Su último disco, Tobismo, se grabó en San Luis, Argentina, en 2009. Salió a la venta en 2010 y este año se llevó el premio Graffiti en su categoría. Hicieron una gira por el país, luego de ganar los Fondos Concursables que otorga el Ministerio de Educación y Cultura, se fueron a la Semana de la Cultura Uruguaya en La Habana, Cuba; y participaron en el Sao Leopoldo Fest, en Brasil.
Fernando: El viaje a Cuba fue impresionante. Nos ha pasado varias veces de encachilarnos con cosas que después no salen, entonces estábamos muy escépticos de que saliera. Al final salió y nos fuimos con artistas como Malena Muyala y Fernando cabrera.
Mario Gulla (violín): Cuba es otro mundo. “Bienvenidos al socialismo”, para empezar. Acá estás podrido de ver propaganda por todos lados, te cortan la programación de la televisión… allá lo que ves es propaganda, pero de la revolución. Los autos viejos, pero que andan increíble porque los motores son nuevísimos. La música es increíble; vas caminando por La Habana vieja y hay 50 mil boliches, todos tocando, grupos con distintas formaciones, violín, clarinete, laúd, mucho jazz… lo que más hicimos fue absorber. El nivel cultural de la gente es desconocido para nosotros; la gente que te pide una moneda en la calle y vos la mirás con los prejuicios que traés de acá y allá son ingenieros, licenciados… el nivel del pueblo es increíble, te supera.
En el recital del 23 de noviembre habrá invitados como Fernando Cabrera, Leonel Gazzo (bandoneón) y Leonardo Croatto (productor del disco).
Fernando: Esta vez vamos a tratar de hacer las cosas bien, porque a veces queremos darle cosas al público y se nos ocurren miles de ideas que después son difíciles de realizar.
Empiezan a acordarse de cuando tocaron en bata y calzoncillos.
¿Lo van a volver a hacer?
Mario: No, no…
¿Se notaría demasiado el paso de los 15 años?
Mario: Exactamente
¿Por qué piensan que llegaron a tocar tanto tiempo juntos?
Mario: Laburar en grupo no es fácil. Como cualquier laburo, hay cosas que te rompen los huevos. Pero creo que es porque nos sigue encantando lo que hacemos, siendo encantador, en el sentido estricto de la palabra. Seguimos siendo amigos y compañeros de viaje.
Miércoles 23 de noviembre, 21 horas, Teatro Solís.
Entradas desde $ 150 en venta en todos los locales de red UTS y boletería del teatro.Financia Oca en dos pagos.