El proyecto de ley del diputado Aníbal Gloodtdofsky prohíbe “la circulación de equinos y de carros tirados por equinos en la vía pública de todas las zonas urbanas mayores de 5.000 habitantes”.
Con carteles, pancartas, matracas y silbatos, varias organizaciones pro derechos de los animales se agruparon en la explanada del Palacio Municipal. “En el año del Bicentenario, si la patria se hizo a caballo, así se lo agradecemos???” se leía en un cartel junto a una ilustración de un caballo tirando un carro. Otra anunciaba: “Sí al proyecto de Aníbal Gloodtdofsky, abolir la tracción a sangre ya”.
La oratoria, con megáfono en mano, comenzó con una duda colectiva a cargo de la docente y activista, Rosa Latorre. “La pregunta que nos hacemos todos: ¿Cuál va a ser el destino de esos animales?”, exclamó la profesora que fue interrumpida por un grito de “¡matadero!”. Retomó Latorre: “porque el señor ingeniero Ricardo Pratto (secretario general de la IMM) dijo en la entrevista que iban a un lugar seguro” una vez retirados de las calles. La respuesta no los convenció.
“En este país no puede ser que los animales sean considerados objetos, son seres vivos que sienten el dolor, el frío, el sufrimiento y el maltrato como nosotros”, dijo y desencadenó el primer aplauso espontáneo. La oradora continuó y aseguró que si los niños no son sensibilizados con el tema, “van a ver como común quitarle los ojos a un perro o a un gato”.
El segundo aplauso y griterío apareció luego de “los animales no son negocio, son vidas, si a nosotros nos lastiman, siempre va a haber alguien que nos venga a ayudar. Los caballos, los perros, los gatos, esos animales que la gente compra como juguetes para los niños porque viene Papá Noel, porque vienen Melchor, Gaspar y Baltasar y todo lo demás, son objetos para ellos, está en todos nosotros no permitir que esto siga”.
Los activistas también se mostraron molestos con el anuncio de la intendenta Ana Olivera respecto al gasto de treinta millones de dólares en la adquisición de más contenedores y camiones. "¿Por qué ese dinero no es puesto para este plan?”, exclamó en referencia a la propuesta de estas organizaciones de que se sustituyan los caballos por vehículos a motor.
Los organizadores también instaron a que los ciudadanos denuncien ante la policía cuando vean una situación de maltrato a un animal.
Todos coinciden en que están de acuerdo con las tareas de reciclaje y clasificación, “pero no con caballos, símbolo de libertad en nuestro Escudo Nacional”.
Terminó de hablar Latorre y el megáfono pasó a las manos de Ana Rita Colombo, directora del Instituto Legal de los Derechos de los Animales (ILDA), que se postula como concejal para las próximas elecciones vecinales. Colombo explicó cómo surgió la idea de su candidatura a vos alzada. En el municipio de Pocitos, el concejal propuso desestimular el pasaje de los recicladores con carros pidiéndole a la ciudadanía que apoye la causa. El objetivo es que los vecinos no dejen la basura directamente en los contenedores sino que, por ejemplo, las viviendas con servicio de portería reciban directamente al camión de recolección de residuos que pasaría por los edificios a buscar los desechos, reduciendo así la cantidad de basura en los contenedores. “Salí de la reunión y dije en chiste, si ustedes como concejales lo lograron, yo también me voy a postular a concejal, y bueno, saqué los papeles. No es por mí, es por los caballos, solo necesitamos 600 votos”.
Por último, anunciaron la apertura de una cuenta en una red de pagos para recaudar fondos y costear los afiches que empapelaran los alrededores de la intendencia “con las fotos más crueles” como la de una yegua que murió a principios de este año sobreexigida por su jornada laboral.
Finalizada la oratoria, los manifestantes comenzaron a marchar por 18 de Julio atentos. “Por favor tengan cuidado, cruzamos en el semáforo, no se olviden que tenemos unos Alonso (en referencia al conductor de Fórmula Uno español) que no les importa, ni miran a un animal, menos miran a un humano”, exhortó Latorre.