Aún se desconoce el motivo de la medida, pero Uruguay es uno de los países perjudicados porque hay dos imprentas dedicadas principalmente a este mercado. Zonalibro que produce entre 800 mil y un millón de libros por año para el mercado argentino y Prosur (Zona Franca de Colonia) que tiene una producción mayor.
El director de Zonalibro, Sergio Suárez, dijo que se desconoce quién ordenó paralizar las importaciones. “Por lo que me han dicho los clientes a los que les importo libros, en Argentina no saben quién dio la orden. Si fue el Ministerio de Industria, si fue el Ejecutivo, pero hay un montón de libros trancados y es una situación alocada, porque el libro en cualquier parte del mundo es un producto de libre tránsito al que no se le pone trabas de ingreso, pero Argentina está siendo pionero en estas cosas”, sostuvo.
Según el Ministerio de Industria argentino, en ese país se comercializan 76 millones de libros por año. El 78% se imprime fuera del país. Algunos de los principales proveedores están en Chile, China y Uruguay.
Suárez dijo que están preocupados por la situación. “Estamos empezando a hacer los contactos con la Unión de Exportadores, a nivel de Cancillería para ver qué se sabe acá sobre el problema”, expresó.
Argentina tiene bloqueada la posición arancelaria 49-01 que autoriza la entrada de libros y folletos de cualquier parte del mundo.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, escribió a través de su twitter que "ante algunas dudas vertidas en las redes sociales, deseo comunicar que, NO HAY PROHIBICIÓN DE IMPORTACIÓN DE LIBROS. De ninguna manera". Y después agregó "Hay un cúmulo de información en proceso que seguramente estará regularizado a la brevedad".