El director del Programa Nacional de Control del Cáncer, Ignacio Musé, habló con No toquen nada (Océano FM) y explicó que los factores epidemiológicos relacionados con el cáncer y sobre todo los que puedan tener con elementos causales, sean físicos, químicos, agentes biológicos son frecuentemente estudiados por reuniones de científicos, como en este caso en Lyon. “El tema del uso de las microondas, de las altas frecuencias, ha sido el tema de preocupación desde hace mucho tiempo”, dijo, y recordó que en Uruguay, el director del Registro Nacional del Cáncer, Enrique Barrios ha trabajado específicamente en el área, estudiando el impacto de las altas frecuencias en áreas como Salto Grande, donde hay grandes transformadores eléctricos. “Hasta el momento la información ha sido muy contradictoria, difícil de interpretar y si leen en detalle el informe de esta reunión de expertos, en definitiva lo que hace es poner un pequeño llamado de atención a un hecho que eventualmente pudiera tener alguna relación, pero no hay nada definitivamente concluyente”.
Explicó que el informe se refiere exclusivamente al uso de los celulares como causa del aumento de un incremento de la frecuencia de aparición de tumores primitivos en el sistema nervioso central, es decir, que se originan en el cerebro y son muy infrecuentes.
En cuanto a la advertencia, Musé dijo que este llamado de atención se puede comparar con el estado de inquietud que produce la advertencia sobre el riesgo que corren los fumadores pasivos. “El riesgo que tiene un fumador pasivo por la exposición es relativamente pequeño, comparado fumador. Pero son tantas las personas que se exponen, que esto tiene un impacto sanitario muy grande”, y agregó que como en el mundo hay casi tantos celulares como habitantes, el mínimo riesgo que hubiera podría tener un impacto sanitario importante. “Pero si ustedes se fijan, el informe no es concluyente, porque no se refiere específicamente a cuánto tiempo se use el equipo ni a qué tipo de equipo”, algo necesario al evaluar el efecto de un producto en los seres humanos. Además, como los celulares son un producto relativamente nuevo, no hay forma de estudiar todavía sus efectos a largo plazo.
En su opinión, el tema no está para nada aclarado y no hay nada en el informe que afirme en forma categórica que existe el riesgo. “No hay todavía nada concluyente y no hay ninguna razón para generar una alarma colectiva con este tipo de resoluciones”.
La Organización Mundial de la Salud definió ayer que los teléfonos celulares son posiblemente cancerígenos. El Centro Internacional de Investigación sobre el Cáncer señaló que no puede desacertar el riesgo cancerígeno que provoca el uso de estos dispositivos, por eso los celulares quedaron clasificados dentro del tercer escalón de peligrosidad en la escala de la OMS.
Esta resolución llegó después de una reunión de trabajo de 31 científicos de 14 países que estuvieron reunidos en Francia durante una semana para evaluar los riesgos del uso de los móviles y otros dispositivos inalámbricos.