“Yo creo que tenemos que buscar esos caminos. Podrá ser la derogación, sí. Habrá que dictar actos administrativos por parte del Poder Ejecutivo. El Poder Judicial tiene que seguir actuando. En el gobierno del Frente Amplio, aplicando como se debía la Ley de Caducidad, determinó que ciudadanos civiles y militares hoy estén presos”, señaló el ex presidente.
En tal sentido, reclamó buscar “un acuerdo político para derogarla”. “Estoy convencido después de haber ejercido la presidencia del país, de que uno puede hacer la mejor ley pero si no logra los consensos políticos y sociales necesarios, va al cajón de los trastos viejos”, dijo.
El líder de la izquierda llamó a tener tranquilidad y no demonizar a nadie a partir de ahora, en lo que pareció una alusión a Víctor Semproni, el diputado que impidió que se aprobara una ley para anular la Ley de Caducidad.
“Este es un problema de todos, del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo, del Poder Judicial, del sistema político y de los uruguayos todos. ¿Por qué no abrimos una etapa de reflexión, de análisis, nos sentamos en una mesa quienes nos oponemos a esta ley y buscamos entre todos la salida para que no esté más en el sistema jurídico uruguayo? Con tranquilidad, con seriedad, con responsabilidad, sin dramatizar, sin demonizar a nadie”, reclamó.
El ex presidente dijo que sus dichos del 21 de marzo en otro comité de base fueron malinterpretados. Vázquez dijo que en esa oportunidad leyó un texto de discusión entre el papa Benedicto XVI y el filósofo ateo Paolo Flores D’Arcais. Vázquez afirmó que el sí piensa que los temas de Derechos Humanos no se deben poner a consideración de la gente.