El Parque era una olla a presión hace un par de domingos por la noche. Miramar ganaba y la gente estaba a punto de explotar. Juan Ramón Carrasco puso a Marcelo Gallardo, el argentino se juntó con Viudez y ambos pusieron fútbol dentro de la cancha y calma fuera. Ese triunfo 3 a 1 terminó siendo el tanque de oxígeno de un equipo que comenzó a rendir más cerca de sus posibilidades a partir de esa noche.
Después llegó el 2 a 0 claro ante Liverpool, el 1 a 0 de visita y por Copa frente a Argentinos y ahora el 3 a 0 sobre Cerro. La racha le permite a Nacional prenderse en la lucha por el Clausura y la Anual y seguir ilusionado en la Libertadores.
En el triunfo ante el albiceleste, hubo una figura descollante: Tabaré Viudez quien con velocidad y talento fue incontenible por derecha. Sin embargo al tricolor le costó darse cuenta que el partido estaba por ese costado. En el comienzo del partido insistió demasiado por la izquierda con largos pelotazos de Cristian Núñez para Porta. Si bien se generaron algunos desbordes interesantes a Nacional le costaba desnivelar a velocidad. Mientras esto pasaba, Viudez movía los brazos, la pedía, miraba a sus compañeros pero no la recibía.
Bastó que el equipo de Carrasco intentara una vez por el sector derecho para ponerse en ventaja. La figura de la tarde recibió y metió un centro al corazón del área. A la pelota no llegó García pero por detrás se elevó con un salto Porta, que le hizo honor a su apodo. El Canguro metió el cabezazo y puso el balón contra el ángulo de Rolero.
Cuando Nacional controlaba el partido, Sebastián Coates entregó mal y obligó a Núñez a cometer una falta de amarilla. Carrasco sorprendió con el cambio. No por su decisión de sacar a los jugadores amonestados, lo viene haciendo hace tiempo, sino por la inclusión de Jadson Viera por el lateral izquierdo.
Pareció cantado que Cerro debía insistir por allí y Ricardo Ortiz ejecutó un cambio en ese sentido. Puso a Sergio Pérez para que intentara complicar con su velocidad. Sin embargo el villero equivocó el camino con pelotazos para que el futbolista peleara ante rivales que le sacan 20 centímetros.
En el inicio del segundo tiempo Carrasco agotó los cambios. Debió sacar a Robert Flores y a Gonzalo Godoy, ambos por lesión. Parecía que el panorama se le complicaba, más aún cuando Alejandro Lembo chocó con Jonathan Soto y quedó cortado en el césped, pero fue solo durante 15 minutos. Allí Cerro dominó y estuvo cerca del área tricolor.
Sin embargo en una jugada iniciada por Lembo, llegó el segundo. Mauricio Pereyra, de buen partido, asistió a Viudez quien a velocidad escapó de su marca y volvió a entregar para Porta que tocó de derecha hacia el fondo.
Cerro intentó con sus armas y tuvo alguna oportunidad para descontar pero estuvo lejos de complicarle el partido a Nacional.
Sobre el final el Morro aportó su gol habitual para darle forma al 3 a 0 final.
Nacional encontró el rumbo gracias a un jugador que llegó para ser figura, demuestra en cada pique lo qué vale y deja claro por qué los dos grandes pelearon por tenerlo. Porque Viudez no corre. Vuela. Y gracias a eso, Nacional camina.
