La sensación colectiva es que Bardanca está de vuelta. Pero en realidad nunca se fue. Eso sí, cuando canal 10 lo echó por su visión crítica sobre la empresa Tenfield y su dueño Francisco Casal, su realidad pasó a ser la del pluriempleo. “Por un lado estuvo bueno porque me permitió seguir funcionando pero estoy grande y la falta de estabilidad me inquieta. No tuve una realidad laboral estable pero fue mi elección”, contó el periodista.
Actualmente Bardanca conduce Derechos Exclusivos por radio Uruguay, es panelista de Estadio Uno, escribe en la revista Caras y Caretas y mantiene un vínculo laboral “reducido por cambios en la programación” con TV Ciudad. En este tiempo además escribió, en el 2007, el libro Yo Paco con el cual ganó el premio al libro de Oro.
“Cuando salí en el 4 durante el Mundial la gente me decía ‘qué bueno que volviste a trabajar en la tele’ y yo nunca dejé de trabajar. El tema es el alcance de los medios que trabajé. Y ojo que para mi nunca fue un condicionante en absoluto ese tema porque en esos lugares pude funcionar sintiéndome a gusto con lo que hacía y haciendo lo que me gustaba hacer”, dijo Bardanca a 180.
Sobre fin del 2010 y tras su participación en las trasmisiones del 4 de la Copa del Mundo de Sudáfrica, las autoridades del canal le plantearon ser parte de Telenoche. Después de más de dos meses de negociaciones Bardanca aceptó y este lunes debutó como columnista.
Fue el regreso formal a un informativo central luego de su salida, en pleno Mundial 2002, de Subrayado. “La vuelta tiene significación y te demuestra que hay cosas que han cambiado y que estás vivo y vigente”, dijo y agregó: “Se me convoca desde una canal privado siendo yo mismo. No modifiqué mi forma de ser, de pensar, ni de actuar. Y eso es bueno. Llaman a la misma persona que trabajó en su momento en otro canal privado”.
Bardanca reconoció que tras su salida del 10 creyó que “nunca más” tendría la posibilidad de trabajar en un canal privado e incluso fue más allá: “Pensé que no iba a seguir haciendo lo que me gusta porque por un lado la ola me tapaba pero por otro también me consumía y me saturaba”.
Fue ahí cuando pensó en tomarse un avión. “Al principio pensé en irme del país. Hice algún contacto porque no me gustaba lo que pasaba pero no prosperó. Después me di cuenta que uno tiene que defender legítimamente los espacios que consiguió y que desde el lugar que sea se puede mantener una mirada crítica”, indicó.
El periodista estará viernes, sábados, domingos y lunes en Telenoche central y no tiene miedo a llamadas pidiendo su cabeza en caso de alguna crítica a los poderosos. “Los que me contratan en general manejan medios y deberían resolver por ellos mismos teniendo en cuenta las realidades. Creo que es lo que va a pasar en este caso”, concluyó.