Era una bomba que iba a estallar. En la interna de Peñarol lo sabían. Tenían la certeza que cuando a Sosa le comunicaran la decisión de Aguirre habría un nuevo conflicto interno en el club. Más allá de compartir o disentir con la resolución, el nuevo DT lo dejó claro ni bien lo fueron a buscar para que regresara. “Me puso más condiciones que mi primera novia”, dijo el presidente Juan Pedro Damiani el día de la presentación. Una de ellas fue desafectar a Sosa del equipo.
Aguirre nunca lo quiso. Esa es la realidad. Sosa llegó por iniciativa de Giménez que negoció con el representante del jugador, Francisco Casal, a comienzos de 2010. Fue una de las primeras altas para el Clausura. El DT se molestó con la llegada del volante y hasta estuvo a punto de renunciar luego de que Sosa golpeó al argentino Alejandro Martinuccio tras una discusión. Si bien lo convencieron y continuó en su cargo la convivencia de Aguirre y Sosa siempre fue mala.
El timbre de la casa del Pato en Villa Española sonó el lunes por la tarde. Sosa le abrió la puerta al gerente deportivo del club que le fue a comunicar lo que él ya sabía. Como adelantó 180, el Pato no tenía lugar en el plantel 2011 y Giménez se lo dijo en la cara. Sosa mostró su desagrado con la noticia pero agradeció el gesto.
Tras el encuentro el volante no se quedó callado y ante cada medio que lo requirió, disparó contra Aguirre:
“Cuando volvió a Peñarol sabía que no tenía lugar en Peñarol”.
“Yo no se si Aguirre me tenia miedo, capaz que sí porque no me dirigía la palabra, un día que iba a jugar por Sergio Orteman le dijo a él que me avisara a mi que me iba poner”.
“Tiene un problema personal conmigo. Lo que hizo no es de caballero”.
“Me echó como un perro”.
“No me dejó nada porque no sabe nada. Con él no entrenamos en la semana como para decir que sabe de fútbol o labura bien. Tuvo suerte las dos veces anteriores, con dos buenos planteles que lo sacaron adelante”.
Respecto de su fama de jugador problemático Sosa dijo que “si en este país importáramos envidiosos seríamos el país más rico del mundo. En el barrio cuando alguien cambia el auto dicen ‘debe estar vendiendo merca’. Esto es igual. A la hora de entrenar soy el primero y nunca pongo un pero”.
El Pato tuvo elogios para el técnico de Nacional, Juan Ramón Carrasco, y admitió que jugaría en Nacional. “Esto es por plata. Juego donde me digan. Y más con Carrasco, porque ya lo conozco y sé cómo es como entrenador. Es el mejor entrenador del país y una persona espectacular. Es 15 veces mejor entrenador que Aguirre. Lo sabemos los que entrenamos con ellos todos los días”, manifestó.
Aguirre prefirió no contestarle a Sosa. "No tengo nada para decir al respecto, está todo bien. Es normal que pueda doler un poco, pero no tengo nada para referirme porque no me corresponde", manifestó en radio Sport.