Mujica habló en su audición de M24 de la “anomalía” entre el precio que la industria frigorífica vende el asado para Uruguay y para el exterior.
“Nos duele”, indicó el mandatario que “el promedio del último mes de venta al exterior del asado uruguayo ha sido alrededor de 58 pesos y a los carniceros del Uruguay le está llegando a 85 pesos”. “Los consumidores uruguayos están pagando más caro que lo que pagan los importadores. Vendemos más barato para afuera y le cobramos más caro a los consumidores uruguayos”, agregó.
“Esta diferencia por kilo significa mucho más valor a lo largo del año incluso que la devolución de impuesto. Es mucha plata. Pero es una plata injusta que se le está cobrando al pueblo uruguayo. No debemos pasarnos de la raya”, expresó Mujica.
El presidente comentó que si los agropecuarios “braman” para que el Uruguay se acerque en sus ventas al precio internacional “no puede ser” que cuando el precio internacional favorece haya “un criterio en ese sentido” y cuando el precio internacional está por abajo del precio interno “se castigue” al consumidor interno “porque sí”. Indicó que el precio del asado es “fundamental” porque es un precio de referencia que cuando sube también eleva el precio de las otras carnes “incluso del pollo”.
Mujica señaló que ha defendido “mantener la puerta abierta” de la exportación del ganado en pie “como un método de influir para que no exista abuso en el precio interno” y para que exista “una válvula de escape y una tendencia que vaya aliviando el precio interno”.
El presidente contó que está analizando una acusación de los frigoríficos uruguayos. “Puede haber un mercado muy importante que nos cobra aranceles imposibles, de cerca de 200% si le queremos vender. Esa es una distorsión del precio internacional de las cosas y no tiene nada que ver con la libertad de mercado. Desde este punto de vista capaz que le podemos dar la razón a los frigoríficos que están acusando esto que se puede considerar competencia desleal”, expresó.
Sin embargo, Mujica argumentó que “no puede” haber “una actitud en un sentido y otra en otro”. “Me pides que no permita una exportación desleal que tal vez tu tengas razón y es muy probable que te la de. Al mismo tiempo te pido que tengas en cuenta que el consumidor uruguayo es el segundo cliente de la carne que tiene Uruguay”, agregó. Llamó la atención “por el momento” y pidió “por favor” a los frigoríficos que “se tenga en cuenta esta anomalía”.